Leyendas de Bolivia: Los Cuentos de Mi Abuelo

Este cuento me lo narró Sebastian Cuevas, el "Chapaco". Era como un padre para mi. En aquel tiempo la Plaza Murillo en La Paz no tenía ni asfalto y en una noche de tantas éste señor desvelado salió a pasear.


Era como la media noche y caminaba por la plaza y mirando alrededor solo vió una persona sentada en un banco. Esta se encontraba agachada, parecía dormir. Entonces se acercó y le preguntó la hora pero esta persona no le respondió. Le volvió a preguntar repetidas veces y de pronto esta persona levantó la cara y no era otra cosa que una calavera que le respondió "¿sabes a quien estas preguntando?"

El Chapaco comenzó a correr despavorido y después de varias cuadras miró para atras. La calavera lo seguia. Siguió corriendo hasta llegar a su casa, entró, cerró la puerta, y juró que no saldría más de noche.

Pero les cuento que no fué la ULTIMA NOCHE que salió ni el último susto que tuvo en sus salidas nocturnas, pero eso ya les contaré otro día. Les escribió Gabriela Rojas.